sábado, 29 de diciembre de 2007

La Navidad vivida con nuestros abuelos

Hola amigos y amigas, aquí estamos de nuevo para contaros algo de estos dias vividos con nuestros abuelos: Como, cada año, la cena de Navidad, resulta algo extraordinario para nosotras y para ellos. Celebramos en nuestros corazones el gran acontecimiento del nacimiento de Nuestro Señor. Por eso queremos que todo el mundo sea feliz. empezando por los que tenemos a nuestro lado.















Este año, la cena nos la regaló una señora de habla hispana, a quien agradecemos profundamente, su detalle. Nosotras, cantamos villancicos, a estilo español ( sin turrones ni vinos, claro está) y después, repartimos regalos, también donación de una religiosa, hermana de uno de nuestros ancianos. Ellos disfrutaron de lo lindo. Comieron, bailaron y recibieron los regalos con suma alegría.















A las doce de la noche, nosotras tuvimos el gran privilegio de tener Eucaristía. Celebró un sacerdote copto católico, que tuvo el gran detalle de ofrecerse a ello. Para los abuelos resultaba tarde y no convenía a su situación.

Realmente el Señor, nos colma de atenciones. El dia de Navidad, la comida resultó, también, algo excepcional. Adornamos las mesas con manteles blancos, cual si de una boda se tratara. Pero, que mejor boda que Cristo hecho carne por nosotros. Nuestro Dios en la humildad de un Niño, ha querido venir y quedarse a nuestro lado, para curar nuestras dolencias, sanar nuestros corazones, renovar nuestra vida. Él es nuestra esperanza. Él es la luz que brilla para que no vivamos en tinieblas. Después de la comida, de nuevo cantamos villancicos y, algunos de ellos, cantaron cantos religiosos en su idioma. Todos apludíamos, reíamos y éramos felices.

Así, concluimos estos dos dias tan importantes en nuestra vida, de los que recibimos fuerza para seguir caminando, con el deseo de que este grupo de ancianos, puedan vivir de forma digna, pero sobre todo, puedan reconocer, que Cristo no les abandona.

Gracias Javier, gracias Dorli, gracias a todos por vuestra cercanía hacia nosotras. Que Dios os bendiga. Feliz año que comienza.

Abrazos y oraciones de Mª Carmen y Marisol.

martes, 18 de diciembre de 2007

Para que el mundo sea más humano,más solidario y feliz.

Hola amigos y amigas: Se nos fue Javier y nosotras no somos muy expertas en la materia.Escribiremos una vez por semana, porque las ocupaciones, no nos dan para más.

Estos días, ya próximos a nuestras entrañables fiestas navideñas, todo respira alegría, aire nuevo, entusiasmo,etc. Deseamos que el día 24, cuando celebremos el nacimiento de nuestro Señor, nos acordemos unos de otros y tengamos presente las intenciones que, cada cual tenga en su interior.

Jesús quiere nacer en cada uno de nosotros para renovarnos, para fortalecernos, para alentarnos, para que vivamos felices. Quiere vivir a nuestro lado asumiendo todo lo nuestro, y haciéndolo suyo.Pidamos, porque nazca en el corazón de todos los hombres y mujeres, para que el mundo sea más humano, más solidario, más feliz.

Gracias a todos vosotros por vuestros detalles. Estamos muy contentas de haberos conocido a través de este medio. Poco a poco, os iremos contando nuestras experiencias y vivencias, con la intención de que conozcais esta misión y la hagáis vuestra, porque todo lo que sucede, en este mundo, nos atañe a todos. Un brazo. Marisol y Mª Carmen.

viernes, 14 de diciembre de 2007

Feliz Navidad

Esta felicitación navideña está hecha en parte por los abuelos acogidos en la casa, que como cada año, han vuelto a realizar el Belén. Está hecho con cartulinas y pinturas.

Con ellos, os mandamos el deseo de una Feliz Navidad, de paz y felicidad. Que el niño Dios nazca en vuestros corazones y en el corazón de todos los hombres y mujeres.

Un abrazo,

Marisol y Maricarmen.

martes, 11 de diciembre de 2007

Historia de esta misión

Somos dos misioneras, Marisol y Maricarmen, consagradas, pertenecemos al Instituto Secular Pro-Ecclesia.


Llenas de ilusión, salimos de España, rumbo a El Cairo, el 16 de octubre de 2004, con un proyecto hermoso en nuestro corazón: entregar la vida por los más necesitados. Habíamos sentido la llamada del Señor y ahí estábamos, dispuestas a responder con un que se hiciera realidad.



Después de muchas dificultades, entre ellas, el desconocimiento del idioma, aquí estamos, llevando esta misión de ancianos sin recursos, necesitados de atención y cariño. Esta obra funciona gracias a la Providencia de Dios, que pone como instrumentos suyos a tantas personas generosas que colaboran desde España y aquí en El Cairo.


La casa, donde viven los ancianos, es un sótano grande, pintado con gusto en colores finos y atrayentes. Los dormitorios son salas espaciosas, compuestas por camas seguidas. Es verdad que no responde a lo que nosotras desearíamos para esta misión pero, poco a poco, vamos renovando lo que podemos y va adquiriendo un nuevo estilo. Nos hemos visto obligadas a abrir alguna ventana, a arreglar baños y a instalar duchas, para poder llevar a cabo una atención al anciano, que responda a una vida digna. Todo esto gracias a nuestros entrañables colaboradores y a sus generosas aportaciones.


Nuestra estancia en Egipto, con una cultura tan distinta a la nuestra, está suponiendo para nosotras una nueva experiencia con un cambio de mentalidad. La infinidad de religiones que se dan en este pais: coptos católicos, coptos ortodoxos, católicos latinos, cristianos protestantes y como mayoría musulmanes, nos hace percibir esta pluralidad y constatar que todas las religiones tienen mucho de bueno.


Nosotras trabajamos por el ecumenismo, de forma que en esta casa, tienen cabida las distintas formas de amar y alabar a Dios. Siempre unidas al deseo de nuestros Papas Juan Pablo II y ahora Benedicto XVI, sentimos la necesidad y la urgencia de que se produzca la unidad entre los cristianos. Partimos de la última voluntad de Nuestro Señor: "Que todos sean uno, como Tú y yo somos uno, para que el mundo crea que Tú me has enviado" (Jn 17:21). Cada día pedimos por esta intención con la convicción de que llegará el momento en que se produzca este milagro bajo la acción del Espíritu Santo.


sábado, 8 de diciembre de 2007

Día de la Inmaculada

Hoy celebramos el día de la Inmaculada Concepción. Es un día muy especial para nosotras. Principalmente porque es el aniversario de nuestra consagración a Dios.

Hemos tenido Eucaristía en casa, celebrando un Abuna copto-católico del seminario, lo cual nos llena de gozo por la comunión que hay entre nosotros, ya que nuestra intención siempre ha sido y sigue siendo que esta casa sea un lugar de encuentro ecuménico.
Además, estamos conviviendo con un amigo y colaborador de la obra, que llegó ayer a nuestra casa, después de dos años de su marcha de El Cairo. Con él estamos aprendiendo esta forma de llevar el mensaje de Cristo a todos los rincones del mundo. Por eso, qué mejor día que hoy para inaugurar este blog en el que vamos a ir contando nuestras experiencias y nuestras vivencias en esta misión que un día Dios puso en nuestro camino y que nos sigue regalando día a día.

Os deseamos de todo corazón que la Madre os acompañe y os bendiga en cada una de vuestras labores.



Cada día, rezamos el rosario con los abuelos , en árabe.